Cuidados al lavar la mochila arhuaca

TENGA EN CUENTA LAS SIGUIENTES RECOMENDACIONES PARA DARLE UNA LARGA VIDA A SU MOCHILA ARHUACA
Lo primero que deben tener en cuenta es que las mochilas arhuacas están hechas con finas fibras naturales que resultan de un proceso manual de tiempo y dedicación exigente, y aunque están diseñadas para ser durables y fuertes, deben tener un cuidado especial tanto en el lavado como en su manejo diario. Recordemos que las mochilas pueden ser hechas en fique, en lana de ovejas o con la inclusión de algunas fibras de madeja de colores (tipo industrial), por lo cual estas recomendaciones que hemos preparado para todos ustedes son generales y aplican para cada una de las mochilas, de manera que nuestra intención es que sigan estos consejos para que logren mantener sus mochilas por muchos años como nuevas.

CUIDADOS DIARIOS QUE DEBEMOS TENER CON LA MOCHILA

La mochila debe ser su compañera fiel cada día, por tanto, mantenga los cuidados apropiados para evitar que sufra cortaduras, vertimientos de líquidos, aceites y demás sustancias que pudieran manchar las fibras de la mochila. Su mochila entra ha hacer parte de su cuerpo por eso cuídela como tal, y evite a toda costa exponerla a los peligros antes mencionados.

CUIDADOS EN EL LAVADO
Lo primero antes de lavar la mochila es que debemos ver si es necesario lavarla, en lo posible debemos evitar lavarla con alguna frecuencia, lo recomendable seria en una frecuencia de 6 meses ó si realmente es necesario.
  1. Para lavarla debemos usar un jabón suave, en barra o liquido de manera que no les deje ningún tipo de residuos en la mochila una vez se seque.
  2. Lavar solo a mano, nunca lavarla en lavadora, nunca usar cepillo de lavar ya que puede sacar los hilos.
  3. Pueden dejarla en el agua de jabón durante unos 20 minutos remojando antes de iniciar el lavado a mano si la mochila está muy sucia.
  4. Una vez se esté lavando la mochila deben lavar las dos caras de la mochila, es decir; una vez hallan lavado un lado deben voltearla al revés y lavar también esa parte. No olviden lavar muy bien la gaza.
  5. Restrieguen suavemente con la mano sobre la mochila hasta sacar todo el sucio posible, y enjuaguen con abundante agua limpia hasta quitar todo el jabón.
  6. Enjuaguen por los dos lados volteándola al revés para que quede sin ningún rastro de jabón.
  7. Repita nuevamente la operación del lavado, restriegue y enjuague a mano como se describió anteriormente. La mochila debe quedar completamente libre de jabón.

CUIDADOS EN EL SECADO
El secado es muy importante para la vida de la mochila por tanto siga las recomendaciones y permita que se seque completamente. Nunca usar secadora, ni el centrifugado de la lavadora. Nunca intentar secar con plancha u otro calentador ya que puede quemar las fibras. El secado debe tener su tiempo.
  1. Escurra con la mano la mayor cantidad de agua posible sin torcerla, sino haciendo movimientos de arriba hacia abajo para sacar el agua. Nunca usar secadora para sacar el agua ya que puede deteriorarla.
  2. Una vez libre de agua déjela al revés y llévela al colgadero para que se seque al sol.
  3. Evite la exposición prologando al sol intenso, una vez esté más o menos seca ubicar en una zona de luz indirecta y mucha brisa.
  4. Al ponerla a secar con un gancho en la cuerda o sitio de secado, le recomendamos dejarla boca abajo recogiendo la gaza hacia arriba para que por inercia descargue el agua restante. Tenga en cuenta que lo más seguro es que necesite una taza donde caiga el agua que escurre.
  5. Cerciórese de que la mochila quede completamente seca antes de guardar, eso le evitará malos olores por humedad.
  6. Manténgala en un sitio seco y con ventilación, ojalá al aire libre colgada para que pueda irse con usted en cualquier momento.